, mezclandose
en cosas politicas de nuestro pais y apoyando de una manera tan
descarada a un propagandista del "varonismo", enemigo de la tranquilidad
del Estado! Tiemblo por usted y tiemblo por mi.
Gillespie no necesitaba oir al profesor para darse cuenta de la gravedad
de su acto. Pero renacia su colera al acordarse de los pinchazos de
aquellos pigmeos, y creia sentir aun el dolor en sus piernas. ?Por que
no lo habian dejado dormir en paz?...
Sin embargo, los gestos desesperados del profesor sirvieron para hacerle
pensar que estaba a merced de aquella humanidad pigmea, despreciable
para el, pero sin la cual no podia alimentarse ni atender a otros
cuidados que necesitaba su persona.
Flimnap, creyendo ver en su rostro un reflejo de intensa colera, le
recomendo la calma.
--No se exalte, gentleman; al contrario, debe usted mostrarse prudente y
conciliador. Creo que esto se arreglara finalmente. Puede usted
presentar sus excusas al Padre de los Maestros. Yo explicare que todo se
debe a su desconocimiento de nuestra lengua y nuestras costumbres. Lo
que me preocupa mas es lo de Ra-Ra; pero si no hay otro remedio, lo
abandonaremos y que siga su destino. El amor es egoista, gentleman.
Antes de venir usted a esta tierra yo hubiese hecho los mayores
sacrificios por ese joven. Pero ahora no es lo mismo; ahora esta usted
aqui, y mas alla de su persona nada me interesa.
Parecia haber olvidado el catedratico todas las inquietudes que le
entristecian momentos antes, al saltar del plato-ascensor. Se habia
puesto ante un ojo su lente de disminucion para contemplar el rostro del
Gentleman-Montana, y esto le hacia sonreir dulcemente.
--Creo llegado el momento--dijo con voz insinuante--de mostrarle mi
alma. Mientras usted vivia a cubierto de peligros, yo no me atrevi a
decirle lo que siento. Me dominaba la timidez de todo el que ha pasado
su existencia entre libros, viendo de lejos a las personas. Pero despues
de la locura de usted, la situacion es otra. Tal vez el conflicto con
nuestro Padre de los Maestros acabe por arreglarse, pero en este momento
la situacion es mala. Corre usted grandes riesgos, y por lo mismo
considero oportuno manifestarle lo que no me hubiera atrevido a decir en
una ocasion mejor. Oigame bien, gentleman, y no se ria de mi.... Yo le
quiero un poco y me intereso por su felicidad.... ?Por que no hablar mas
claramente?... Yo le amo, gentleman, y deseo pasar el resto de mi vida
junto a usted, dedicandome e
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