que escribiera
inmediatamente. El hombre quedo muy satisfecho de poder demostrar su
influencia.
Avise a Cadiz, diciendo que me encontraba enfermo y que abandonaba mi
cargo de capitan de la fragata, y espere los acontecimientos. Mi madre
encontraba que dejar la derrota de Cadiz a Filipinas para ir a Liverpool
era bajar de categoria; pero a mi no me han preocupado gran cosa las
categorias.
[Ilustracion]
A principios de febrero, una manana, Mary me mando un recado urgente
diciendome que fuera a Bisusalde lo mas pronto posible. Me vesti, tome
el caballo de Aspillaga y, al trote, me fui a la casa de la playa. Mi
tio Juan habia muerto.
En la casa estaban Mary, el criado viejo, Quenoveva y Urbistondo. Me
entere de lo que se necesitaba. Habia que mandar construir un ataud en
Luzaro. El entierro lo harian al dia siguiente en Izarte.
Enviamos a un hombre a que encargara el ataud al carpintero, y
Urbistondo y yo nos quedamos en la casa.
Me sorprendio bastante ver al medico de Elguea, que alli mismo sobre la
mesa extendio la partida de defuncion del muerto, a nombre de Tristan
Ugarte, de profesion marino.
Me choco, pero no dije nada. Por la noche velamos el cadaver Urbistondo,
el criado y yo, y por la manana lo enterramos en el pequeno cementerio
de la aldea.
Al dia siguiente Mary fue a instalarse al faro, y Allen, el criado
viejo, marcho a vivir a la venta de Izarte.
Unos dias despues, Allen se presento en mi casa con una pretension
extrana. Traia un devocionario en la mano.
--Su tio de usted y yo--me dijo con mucho misterio--sabiamos donde hay
un tesoro escondido.
--iHombre!--exclame yo.
--Si. Esta en la costa de Africa, y en este libro viene la indicacion.
--?En el devocionario?
--Si.
--?Y que quiere usted que yo haga?
--Primero leer lo que dice en el libro; despues, si usted quiere, puede
asociarse a mi.
--Respecto a leer, no tengo inconveniente. Lo que no me explico es por
que no lo lee usted.
--Es que la indicacion esta en vascuence, y no comprendo bien el
sentido.
--Bueno, vamos a verlo.
Tome el devocionario, escrito en ingles, y vi que varias letras estaban
marcadas con lapiz.
--Hay que unir todas las letras senaladas--me dijo el viejo.
Tome un papel, fui uniendo las letras y aparecio al final esta serie de
palabras en vascuence:
Nun ibayean, costatic urruti amabost
milla, N. zazpi O. Gaztelu zarra. Elefantearen
beguitic beiratuaz bi arrien tartean,
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