e bate Alvaro Luna?--dijo uno cuando ya iban
hastiados de los dimes y diretes del concejal y Cobo.
--Eso me han dicho--respondio Pepe Castro cerrando los ojos con
voluptuosidad, mientras chupaba el cigarro--. En el jardin de Escalona,
?verdad?
--Creo que si.
--?A sable?
--A sable.
--Vamos, un chirlo mas--manifesto Leon Guzman desde su asiento.
--Con punta.
--iOh! ya es otra cosa.
Y los salvajes presentes mostraron entonces interes en el duelo.
--Alvaro tira poco. El coronel debe llevarle ventaja. Es mas hombre, y
ademas tira con energia.
--Con demasiada--dijo Pepe Castro sacando el panuelo despues de haber
arrojado la punta del cigarro y poniendose a frotar con esmero la
boquilla.
Todos volvieron los ojos hacia el porque tenia fama de habilisimo
tirador.
--?Crees tu?
--Desde luego. La energia es conveniente hasta cierto limite. Pasando de
el, muy expuesta, sobre todo cuando los sables tienen punta. Si se las
cortasen, todavia redoblando los ataques sin descanso se puede hacer
algo. Por lo menos, es posible aturdir al contrario. Pero cuando la
llevan hay que andarse con ojo. Alvaro no tira mucho; pero es frio,
tiene un juego cerrado y estira el pico que es un primor. Que no se
descuide el coronel.
--?La cuestion ha sido por la cunada de Alvaro?
--Al parecer.
--?Y a el que diablos le importa?
--iPs ... ahi veras!
--Como no este enamorado, no comprendo....
--Todo podria ser.
--iLa nina es de oro! Este verano, en Biarritz, ella y el chico de
Fonseca se ponian de un modo por las noches en la terraza del casino,
que era cosa de sacar fotografias iluminadas.
--Alla Cobo, antes de irse, hizo tambien algunos cuadros disolventes en
los jardinillos.
--iSi, si; bien me ha comprometido esa chica!--manifesto Cobo en tono
comicamente desesperado.
--Ya no tenias mucho que perder. Desde el negocio de Teresa estas
deshonrado--dijo Alcantara.
--Siempre va la desgracia con la hermosura--apunto con tonillo ironico
Ramoncito.
--?Tambien tu, Ramon?--exclamo con afectado asombro Cobo--. Vamos, llego
el momento de que los pajaros tiren a las escopetas.
--Pues, senores, confieso mi debilidad. No puedo estar al lado de esa
chica sin ponerme malo--dijo Leon Guzman.
--Ni esa nina puede tampoco estar al lado de un chico tan guapo y tan
risueno como tu sin ponerse enferma tambien--dijo Rafael Alcantara.
--?Me quieres seducir, Rafael?
--Si, chico, para que me dejes manana la llave
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