veces y estaba apercibido a hacerlo por el mas minimo pretexto.
Ademas, era un desvergonzado, hablaba siempre en tono despreciativo,
aunque fuese a la persona mas respetable, dispuesto a burlarse de todo
el mundo. Estas cualidades le habian hecho adquirir gran prestigio entre
los jovenes salvajes. Se le trataba como a un igual, se contaba con el
en todas las francachelas; pero nadie preguntaba por su dinero.
--Mi general, le habra a usted gustado ayer la Tosti, ?eh?--dijo
Ramoncito Maldonado dirigiendose a Patino.
--En la romanza solamente,--repuso el guerrero sensible despues de
dirigir con destreza una larga bocanada de humo a su boquilla que
representaba un obus montado sobre su curena.
--No diga usted que el duo ha estado mal.
--iVaya si lo digo!
--Pues, senor, entonces declaro que no entiendo una palabra porque me ha
parecido sublime--replico el joven con senales de hallarse picado.
--Esa declaracion te honra, Ramon. Sabes hacerte justicia--dijo Cobo
Ramirez, que no perdia ocasion de vejar a su amigo y rival.
--iYa lo creo, como que solo tu eres el inteligente!--exclamo vivamente
el concejal--. Mira, Cobo, aqui el general puede hablar porque tiene
motivo, ?estamos?... pero tu debes callarte porque me gastas una oreja
como la de una cocinera.
--Pero hombre, ?por que se picara tanto Ramoncito, en cuanto usted le
dice algo?--pregunto el general riendo.
--No se--repuso Cobo dando un chupeton al cigarro mientras sus facciones
se contraian con una leve sonrisa burlona--. Si le contradigo se enfada,
y si repito lo que el dice, lo mismo.
--iSe entiende, chico, se entiende! Si ya sabemos que eres un guason de
primera fuerza. No necesitas esforzarte mas delante de estos senores....
Pero lo que es ahora, has dado una buena pifia.
--Yo sostengo lo mismo que el general. El duo estuvo muy mal
cantado--dijo con calma provocativa Cobo.
--iQue importa que tu sostengas uno u otro!--exclamo ya fuera de si
Maldonado--. iSi no conoces una nota de musica!
--iAlto! Tengo mas derecho a hablar de musica, puesto que no cencerreo
como tu el piano. Por lo menos soy un ser inofensivo.
Siguio una disputa larga entre ambos, viva y descompuesta por parte de
Ramoncito, tranquila y sarcastica por la de Cobo, que se gozaba en sacar
a aquel de sus casillas. No poco se divertian tambien los presentes,
poniendose unos de parte del concejal y otros de su competidor para mas
prolongar el recreo.
--?Sabeis que esta tarde s
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