hace... Como lo huelan los de tropa
no me dejaran pasar--dijo Ramos riendo brutalmente.
--Calle usted, hombre... Ya sabemos que usted pasa
[30] siempre que se le antoja. Pues no faltaba mas. Los militares
son gente de manga ancha... y si se pusieran pesados,
con un par de duros, ?eh? Vamos, veo que no viene
usted mal armado... No le falta mas que un canon de
a ocho. Pistolitas, ?eh?... Tambien navaja.
--Por lo que pueda suceder--dijo Caballuco, sacando 201
el arma del cinto y mostrando su horrible hoja.
--iPor Dios y la Virgen!--exclamo Maria Remedios,
cerrando los ojos y apartando con miedo el rostro.--Guarde
[5] usted ese chisme. Me horrorizo solo de verlo.
--Si ustedes no lo llevan a mal--dijo Ramos cerrando
el arma,--cenaremos.
Maria Remedios dispuso todo con precipitacion, para que
el heroe no se impacientase.
[10] --Oiga usted una cosa, Sr. Ramos--dijo D. Inocencio
a su huesped cuando se pusieron a cenar.--?Tiene usted
muchas ocupaciones esta noche?
--Algo hay que hacer--repuso el bravo.--Esta es la
ultima noche que vengo a Orbajosa, la ultima. Tengo que
[15] recoger algunos muchachos que quedan por aqui, y vamos a
ver como sacamos el salitre y el azufre que esta en casa de
Cirujeda.
--Lo decia--anadio bondadosamente el cura, llenando
el plato de su amigo,--porque mi sobrina quiere que la
[20] acompane usted un momento. Tiene que hacer no se que
diligencia y es algo tarde para ir sola.
--?Va a casa de dona Perfecta?--pregunto Ramos.--Alli
he estado hace un momento; no quise detenerme.
--?Como esta la senora?
[25] --Miedosilla. Esta noche he sacado los seis mozos que
tenia en la casa.
--Hombre: ?cree usted que no hacen falta alli?--dijo
Remedios con zozobra.
--Mas falta hacen en Villahorrenda. Dentro de las
[30] casas se pudre la gente valerosa, ?no es verdad, senor
canonigo?
--Senor Ramos, aquella casa no debe estar nunca sola--dijo
el Penitenciario.
--Con los criados basta y sobra. ?Pero usted cree, Sr.
D. Inocencio, que el brigadier se ocupa de asaltar casas 202
ajenas?
--Si; pero bien sabe usted que ese ingeniero de tres mil
docenas de demonios....
[5] --Para eso... en la casa no faltan escobas--manifesto
Cristobal jovialmente.--Si al fin y al cabo no ten
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