spiritual se une con otra material, ni de que
manera reciprocamente concurren a producir las operaciones; no obstante
si atendemos con cuidado lo que pasa dentro de nosotros, quando
pensamos, o queremos alguna cosa, y reflexionamos en lo que entonces nos
sucede, descubriremos con bastante certidumbre la union de estas dos
substancias, y el origen de sus principales operaciones.
[3] Las acciones que el hombre exercita, o son materiales y corporeas, o
espirituales. El Alma es a la verdad la causa principal de todas; pero
se diferencian entre si, porque las primeras se executan por disposicion
del cuerpo, y las segundas _especialmente_ existen en el Alma. El
movimiento del brazo, lengua, y piernas: el del corazon, nervios, y
todos los murecillos del cuerpo, proceden del Alma, y no obstante con
razon se llaman corporeos, porque todos se exercitan con el cuerpo. Pero
el imaginar, discurrir, juzgar, y por decirlo de una vez _pensar_, y
_querer_, son acciones espirituales propias del Alma. Estos son
principios ciertos tomados de la Fisica y Animastica, y nos valemos de
ellos como presupuestos bien seguros para averiguar lo que pertenece a
la Logica.
CAPITULO II.
_De las operaciones mentales del Alma._
[4] Asi como el cuerpo humano consta de distintas potencias con que
exercita muy diversas operaciones, las quales conspiran a un mismo fin,
que es la conservacion de la vida, con orden maravilloso entre todas
ellas, del mismo modo en el Alma hay varias facultades, potencias, y
fuerzas con que produce muchos actos, que todos conspiran, se ordenan, y
mutuamente se ayudan al fin de exercitar la razon. Iremos aqui
descubriendo estas potencias del Alma, segun el orden que naturalmente
guardan en sus operaciones: mostraremos los objetos de cada una de
ellas: y manifestaremos como todas se ayudan y concurren al exercicio de
la racionalidad. No solo los Filosofos antiguos, sino tambien los
modernos tratan este asunto con suma confusion, atribuyendo a una
potencia lo que es de otra, y mezclando entre si las cosas que debieran
separar, de donde nace mucha obscuridad, y de ella muchos errores y
falsedades, de que estan llenos los libros antiguos y modernos de
Logica. La misma naturaleza ensena a todos los hombres, si quieren ser
atentos en observar lo que pasa en su interior, que nada hay en su
entendimiento que no haya tomado ocasion de los sentidos. En el
exercicio de la Medicina tenemos todos los dias motivo de asegurarnos
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