. dejar a un ladito los escrupulos. Pues que, ?se va a
ofender Dios por eso?
[25] --Maria Remedios--dijo la senora con altaneria,--no
digas desatinos.
--iDesatinos!... Usted, con sus sabidurias, no podra
ponerle las peras a cuarto al sobrinejo. ?Que cosa mas
sencilla que la que yo propongo? Puesto que ahora no hay
[30] justicia que nos ampare, hagamos nosotros la gran justiciada.
?No hay en casa de usted hombres que sirvan para
cualquier cosa? Pues llamarles y decirles: "Mira, Caballuco,
Pasolargo o quien sea, esta misma noche te tapujas
bien, de modo que no seas conocido; llevas contigo a un
amiguito de confianza, y te pones detras de la esquina de la 178
calle de Santa Faz. Aguardais un rato, y cuando D. Jose
Rey pase por la calle de la Triperia para ir al Casino, porque
de seguro ira al Casino, ?entendeis bien? cuando pase
[5] le salis al encuentro y le dais un susto"...
--Maria Remedios, no seas tonta--indico con magistral
dignidad la senora.
--Nada mas que un susto, senora: atienda usted bien
a lo que digo, un susto. Pues que, ?habia yo de aconsejar
[10] un crimen?... iJesus, Padre y Redentor mio! Solo la
idea me llena de horror, y parece que veo senales de sangre
y fuego delante de mis ojos. Nada de eso, senora mia...
Un susto, y nada mas que un susto, por lo cual comprenda
ese bergante que estamos bien defendidas. El va solo al
[15] Casino, senora, enteramente solo, y alli se junta con sus
amigotes, los del sable y morrioncete. Figurese usted que
recibe el susto y que ademas le quedan algunos huesos quebrantados,
sin nada de heridas graves se entiende...
pues en tal caso, o se acobarda y huye de Orbajosa, o se
[20] tiene que meter en la cama por quince dias. Eso si, hay
que recomendarles que el susto sea bueno. Nada de matar
... cuidadito con eso, pero sentar bien la mano.
--Maria--dijo dona Perfecta con altaneria,--tu eres
incapaz de una idea elevada, de una resolucion grande y
[25] salvadora. Eso que me aconsejas es una indignidad
cobarde.
--Bueno, pues me callo... iAy de mi, que tonta soy!--exclamo
con humildad la sobrina del Penitenciario.--Me
guardare mis tonterias para consolarla a usted despues
[30] que haya perdido a su hija.
--iMi hija!... iperder a mi hija!...--exclamo
la senora con subito arrebato de ira.---
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