s.
Digase lo que se quiera, el arrebatado caracter de Ramos
habia tomado asiento con los anos, enfriandose un poco la
[15] fogosidad que con la existencia recibiera de los Caballucos
padres y abuelos, la mejor casta de guerreros que ha asolado
la tierra. Cuentase ademas que por aquellos dias el nuevo
gobernador de la provincia _celebro una conferencia_ con este
importante personaje, _oyendo de sus labios las mayores
[20] seguridades_ de contribuir al reposo publico y evitar toda ocasion
de disturbios. Aseguran fieles testigos que se le veia en
amor y compana con los militares, partiendo un pinon con
este o el otro sargento en la taberna, y hasta se dijo que le
iban a dar un buen destino en el Ayuntamiento de la capital
[25] de la provincia. iOh! cuan dificil es para el historiador,
que presume de imparcial, depurar la verdad en esto de las
opiniones y pensamientos de los insignes personajes que
han llenado el mundo con su nombre! No sabe uno a que
atenerse, y la falta de datos ciertos da origen a lamentables
[30] equivocaciones. En presencia de hechos tan culminantes
como la jornada de Brumario, como el saco de Roma por
Borbon, como la ruina de Jerusalen, ?que psicologo, ni que
historiador podra determinar los pensamientos que les
precedieron o les siguieron en la cabeza de Bonaparte, Carlos
V y Tito?--iResponsabilidad inmensa la nuestra! Para 151
librarnos en parte de ella, refiramos palabras, frases y aun
discursos del mismo emperador orbajosense, y de este modo
cada cual formara la opinion que le parezca mas acertada.
[5] No cabe duda alguna de que Cristobal Ramos salio, ya
anochecido, de su casa, y atravesando por la calle del
Condestable, vio tres labriegos que en sendas mulas venian en
direccion contraria a la suya, y preguntandoles que a do
caminaban, repusieron que a la casa de la senora dona
[10] Perfecta a llevarle varias primicias de frutos de las huertas y
algun dinero de las rentas vencidas. Eran el senor
Pasolargo, un mozo a quien llamaban Frasquito Gonzalez, y el
tercero, de mediana edad y recia complexion, recibia el
nombre de Vejarruco, aunque el suyo verdadero era Jose
[15] Esteban Romero. Volvio atras Caballuco, solicitado por
la buena compania de aquella gente, con quien tenia franca
y antigua amistad, y entro con ellos en cas
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