objeto que no debe estar
lejos, y que estaba cerca de ti habia
muy poco. Cuando en este terror
secreto volveras la cabeza, quedaras
sorprendido de no verme con tu
sombra sobre la tierra, y estaras
obligado a disimular el poder cuyos
efectos esperimentaras.
Las palabras magicas pronunciadas
sobre tu cabeza han atraido alli
una maldicion terrible, y uno de
los espiritus aereos te ha hecho caer
en el lazo: en el soplido del viento
habra una voz que te privara el
alegrarte; la noche te negara el silencio
de las sombras, y no podras
ver brillar el sol sin desear al momento
el es del dia.
Yo he separado de tus lagrimas
perfidas la esencia de un veneno
mortal, he escogido la sangre mas
negra de tu corazon, he arrancado
a tu sonrisa la serpiente que se
mantenia escondida en las arrugas
de tu rostro, he tomado el hechizo
que hacia tus labios tan peligrosos,
he comparado todas estas ponzonas
a los venenos mas sutiles; los tuyos
son aun mas temibles.
Por tu corazon de hierro y tu
sonrisa de vibora, por tus ardides
fatales, por tus miradas enganosas,
por tu alma hipocrita, por tus artificios
seductores y tu falsa sensibilidad,
por el placer que encuentras
en el dolor de los otros, por la fraternidad
con Cain, vengo a condenarte
a que seas tu mismo tu infierno.
Derramo sobre tu cabeza el licor
magico que te destina a los tormentos
que te preparo, el sueno y la
muerte estaran sordos a tus deseos y
a tus suplicas; veras la muerte a
tu lado para desearla y temerla.
Pero ya tu decreto se cumple, y
una cadena invisible te rodea con
sus eslabones; mis palabras magicas
producen su efecto: tu cabeza se
turba y tu corazon esta proximo a
marchitarse.
ESCENA II.
[El teatro representa el monte Jungfro; el dia da
principio. Manfredo esta solo entre las rocas.]
MANFREDO.
Los espiritus que habia invocado
me abandonan, las ciencias magicas
que habia estudiado me son inutiles.
Busco un remedio a mis males
y no he hecho sino agriarlos: ceso
de contar con el socorro de los espiritus;
lo pasado no es de su resorte,
y el porvenir ... hasta tanto que
tambien este sepultado en la noche
de los tiempos, me causa muy poca
inquietud. iO tierra en donde he
nacido! aurora radiante, y vosotras
altas montanas ? porque sois tan hermosas?
Yo no puedo amaros. Y tu,
antorcha brillante del universo, que
estiendes tu luz sobre toda la naturaleza,
y la haces temblar de gozo,
tu no puedes lucir en mi h
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