la original de Velez
de Guevara (Madrid, Imprenta del Reyno, 1641), no la he copiado tan
fielmente, tan servilmente, que reproduzca su endiablada ortografia,
digo, la de los barbaros cajistas que compusieron los moldes. "Para
regalar a los lectores--escribi trece anos ha[38]--con bocados como
_abaricia_, _hajo, coetes, hizquierda, voca, vobos, obtica,
valbucientes, abitos, hancas y hacechar_, como lo hizo el senor Bonilla
reproduciendo la edicion principe de _El Diablo Cojuelo_, siempre hay
tiempo, o, dicho mejor, no debe haberlo nunca. Ya no es poco _hacer
morder el ajo_ a uno; pero hacerle morder el _hajo_ es crueldad doblada,
porque pica aun mas la _hache_ que el _ajo_ mismo."
Y con esto, lector amable, quedate a Dios, y perdoname si te cause
enfado o tedio con la lectura de mi prologo.
FRANCISCO RODRIGUEZ MARIN.
_Madrid, 2 de junio de 1918_.
EL DIABLO COJUELO
[AL EXCMO. SR. D. RODRIGO DE SANDOVAL,
DE SILVA, DE MENDOZA Y DE LA CERDA,
PRINCIPE DE MELITO, DUQUE DE PASTRANA,
DE ESTREMERA Y FRANCAVILA, ETC.]
Excelentisimo senor:
La generosa condicion de V.E., patria general de los ingenios, donde
todos hallan seguro asilo, ha solicitado mi desconfianza para rescatar
del olvido de una naveta[39], en que estaba entre otros borradores mios,
este volumen que llamo _El Diablo Cojuelo_, escrito con particular
capricho, porque al amparo de tan gran Mecenas salga menos cobarde a dar
noticia de las ignorancias del dueno. A cuya sombra excelentisima la
invidia me mirara ociosa, la emulacion muda, y desairada la
competencia; que con estas seguridades no naufragara esta novela y podra
andar con su cara descubierta por el mundo. Guarde Dios a V.E., como sus
criados deseamos y hemos menester.
Criado de V.E., que sus pies besa,
LUIS VELEZ DE GUEVARA.
PROLOGO A LOS MOSQUETEROS[40] DE LA COMEDIA DE MADRID.
Gracias a Dios, mosqueteros mios, o vuestros, jueces de los aplausos
comicos por la costumbre y mal abuso, que una vez tomare la pluma sin el
miedo de vuestros silbos, pues este discurso del Diablo Cojuelo nace a
luz concebido sin teatro original fuera de vuestra juridicion; que aun
del riesgo de la censura del leello esta privilegiado por vuestra
naturaleza, pues casi ninguno de vosotros sabe deletrear; que nacistes
para numero de los demas, y para pescados de los estanques[41][42], de
los corrales[43], esperando, las bocas abiertas[44], el golpe
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