I. A ESPANA
Nunca mi labio a la servil lisonja
5 Parias rindio. Ni el exito ruidoso,
Ni la soberbia afortunada, oyeron
Falaz encomio de mi humilde Musa.
Diome su austeridad la honrada tierra
Donde naci, y el presuroso tiempo
10 Que arrastra y lleva en sus revueltas olas
Las grandezas humanas al olvido,
A mi pesar me ensena que en el mundo
Tan solo a dos excelsas majestades
Puedo, sin mengua, levantar mi canto;
15 La Verdad y el Dolor.
En estas horas
De febril inquietud, ?quien, Patria mia,
Merece como tu la pobre ofrenda
De mi respeto y de mi amor? Postrada
En los escombros de tu antigua gloria,
20 La negra adversidad, con ferrea mano,
Comprime los latidos de tu pecho page 145
Y el aire que respiras envenena.
Como tigre feroz clavo sus garras
La catastrofe en ti, y en tus heridas
Entranas sacia su voraz instinto.
5 ?Quien, al mirar tus lastimas, no llora?
?Puede haber hombre tan perverso y duro,
Ni aun concebido en crapulosa orgia
Por hembra impura, que impasible vea
Morir sin fe, desesperado y solo,
10 Al dulce bien que le llevo en su seno?
iNo existe, no!
Perdona si movido
Por la ciega pasion, alla en lejanos
Y borrascosos dias, cuando airada
Mi voz como fatidico anatema
15 Trono en la tempestad, quizas injusto
Contigo pude ser. Pero hoy, que sufres,
Hoy que, Job de la Historia, te retuerces
En tu lecho de angustia, arrepentido
Y llena el alma de mortal congoja,
20 Acudo ansioso a consolar tus penas,
A combatir con los inmundos buitres,
Avidos del festin, que en torno giran
De tu ulcerado cuerpo, y si lo mandas,
iOh, noble martir! a morir contigo.
25 Pero ?quien habla de morir? ?Acaso
No eres, Patria, inmortal? Tendras eclipses
Como los tiene el sol. Sombras tenaces,
Cual hiperborea noche larga y fria, page 146
Sobre ti pesaran, mientras no llegue
Tu santa redencion. iHora dichosa
En que veras con jubilo y ternura
Nacer el alba, el tenebroso espacio
5 Inundarse de luz, la tierra encinta
Estremecerse en extasis materno,
De armonias, aromas y colores
Poblarse el aire, y palpitar en todo
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