con recelosa prevision. De pronto da una gran voz, grande y
estentorea_.
EL CAPELLAN
iFalta la lampara!
EL CABALLERO
iTragame, tierra!
EL CAPELLAN
iNo han sido lechuzas las que entraron aqui, fueron lobos!
EL CABALLERO
iNi una luz que alumbre tu sepultura, pobre Rusa! iNada han dejado!
iRusa, pide por mi y por esos ladrones que bebieron la leche de tus
pechos! iSon nuestros hijos, Maria Soledad!
El CAPELLAN
iY no han temido la colera divina!
EL CABALLERO
Y tampoco temen la mia, Don Manuelito!
EL CAPELLAN
iEl Senor pudo enviar sobre sus cabezas un rayo que los aniquilase!
EL CABALLERO
Yo pude enviarles un tiro.
EL CAPELLAN
iSon como fieras!
EL CABALLERO
Son lobeznos, hijos de lobo.
EL CAPELLAN
El Senor Don Juan Manuel nunca ha sido como ellos.
EL CABALLERO
iYo he sido siempre el peor hombre del mundo! Ahora siento que voy a
dejarlo, y quiero arrepentirme. La luz que ellos apagaron se enciende
en las tinieblas donde el alma vivia, y para que mi linaje, donde hubo
santos y grandes capitanes, no lo cubran mis hijos de oprobio, acabando
en la horca por ladrones, les repartire mis bienes y quedare pobre,
pobre de pedir por las puertas.... Ahora probemos entre los dos a
levantar la sepultura.... iQuiero ver a mi muerta!... iAcaso me hable!
EL CAPELLAN
Esos son delirios, Senor Don Juan Manuel.
EL CABALLERO
iPiedra, levantate!
EL CAPELLAN
iDon Juan Manuel somos viejos! Somos viejos y la vejez no tiene
fuerzas. En otro tiempo no digo que no la hubiesemos levantado....
EL CABALLERO
Y ahora tambien.
EL CAPELLAN
Somos viejos.
EL CABALLERO
Mayor peso llevo sobre los hombros.
EL CAPELLAN
Y el que nunca se doblo, se dobla.
EL CABALLERO
Si, me doblo, y solo anhelo dejar la vida, Don Manuelito.
EL CAPELLAN
Ya tuvo el consuelo de rezar sobre la sepultura.... Vamonos de aqui....
?Mas, que ruido fue ese?....
EL CABALLERO
Consegui mover la losa.
EL CAPELLAN
iTiene los brazos de hierro!
EL CABALLERO
iMe sangran las manos!
EL CAPELLAN
Yo le ayudare, senor. ?Donde hallariamos algo con que apalancar?
EL CABALLERO
En esta oscuridad, apenas se ve.
_Recorre el capellan el presbiterio y la capilla. En el fondo oscuro,
sus ojos sagaces descubren de pronto un bulto inmovil, sin contorno ni
faz, que simula la vieja escultura de algun santo. Se acerca mas.
Alarga una mano en las tinieblas, y antes de haber palpado, v
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