cian, de salvar a mugeres, hijos
e hijas.
111. El enemigo entretanto estuvo detenido los cuatro dias
siguientes en el pago o estancia, dicha _Ibicua_, parte por las
lluvias, parte por otras razones. Aunque estaba ya tan vecino el
enemigo, no se podian bastantemente persuadir los indios de
salvar sus cosas. Finalmente por la manana se juntaron los
Miguelistas a llevar las alhajas mas preciosas del templo hacia
el arrojo Piratini, a una hermita hecha de cespedes, de un
pueblo antiguo, y con esta ocasion se persuadio lo mismo a los
de San Lorenzo, y despues a los Juanistas y Angelotes. Pero con
flojedad llevaban las dichas cosas, y no a mayor distancia que
la de dos leguas del pueblo.
112. El dia 10 de Mayo se acercaron los enemigos al rio: pero
recibidos con la artilleria que estaba oculta en la selva,
fueron muertos, segun dicen, 64, incluyendo en este numero los
que mataron los gentiles en los reencuentros. No obstante,
pasaron adelante, retrocediendo los que defendian las orillas
del riachuelo.
113. El dia 11, entrando algunos Nicolasistas con otros soldados
al pueblo de San Miguel, sacaron toda la gente del sexo y edad
mas debil, y asi salieron las mugeres y casi todos los ninos,
que se desparramaron por los campos hacia el Piratini.
114. Dia 12. Habiendose el enemigo acampado en las canteras del
pueblo, distante casi tres leguas de el, y ya a la vista, al
caer de la tarde, los PP. del pueblo de San Miguel se fueron
huyendo tambien al dicho Piratini, no salvando nada del pueblo
de San Miguel, sino que escondidas aca y aculla, y enterradas
las cosas, se fueron. Esto se hizo por falta de bueyes y de
caballos que llevasen los trastes en carros; porque en estos
dias, moviendose, como es costumbre, una disencion entre los
indios, no se porque sospecha, originada de que se hubiesen dado
caballos a un paisano, llamado _Tary_, que se habia pasado a los
enemigos, que aquel los tenia bastantemente gordos, viniendo los
demas espanoles en flacos y exaustos, como los soldados de los
otros pueblos, quitaron a los pobrecitos Miguelistas casi todos
los caballos y bueyes. De aqui nacio que, despues de la salida
de los PP., los soldados de los otros pueblos, especialmente los
de San Nicolas, los Angelotes y Tomistas, pillaron todos los
bagages y el bastimento que se habia dejado en el pueblo,
habiendo hecho pedazos las puertas, y aporread
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